La vida te sorprende.
Un segundo, una pequeña decisión, una mirada diferente… un pequeño gesto puede tener consecuencias catastróficamente bellas.
Durante 4 años hemos tenido la bendición de entrar en el hogar de cientos de personas.(No quiero extenderme mucho pero es necesario para que entiendas cómo nació el manifiesto creativo y porqué nos hemos metido en este lío).
Como te decía… durante 4 años hemos tenido el regalo de entrar en el hogar de cientos de personas. En nuestra escuela online tenemos una mentoría donde ayudamos a personas a crear su propio estudio de papelería de eventos.
Vendemos esa mentoría por llamada, nos reunimos en zoom con personas interesadas, nos conocemos y vemos si encajan con nuestra formación y si realmente podemos ayudarlas.
Hace 15 años que vendemos nuestros productos online, pero intuíamos que una mentoría se vende diferente. Nos formamos y aprendimos a hacerlo.
Esta manera de vender, más íntima, más sincera, más cercana nos ha mostrado la realidad de muchísimas personas que en realidad no buscan una mentoría, sino que buscan esperanza, un cambio radical, un rayito de luz que iluminara sus días grises, algo que las hiciera sentir vivas.
Lo cierto es que en estos años hemos visto de todo:
- Personas que odian su trabajo
- Personas que no cuentan con el apoyo de su pareja
- Mamás que han postergado sus sueños y no se atreven a retomarlo
- Doctoras que no quieren ver más sangre y quieren cambiar de profesión
- Abogadas o gente de la banca que no quiere volver a la oficina
- Camareras que sueñan con algo más
- Personas de baja laboral por ansiedad
Y un montón más de situaciones pero tampoco quiero aburrite, hemos visto de todo.
Personas en la soledad de su casa llorando ante una desconocida (yo). Wow!
Dani y yo nacimos en los 70. En aquella época apenas veíamos la tele, pero hay unos dibujos animados que nunca se me ha borrado: Los Supersónicos, aquella familia del futuro que parecía sacada de un sueño.
Hay un capítulo en concreto que recordé al escribir este post.
La madre, recién levantada, despeinada y con ojeras, recibe una videollamada y corre a ponerse una máscara perfecta, con su cara espléndida.
Y así vamos.
Yo he visto gente llorar frente a mí con un instagram perfecto y feliz.
Yo no estoy exenta, para nada… todos somos humanos y compartimos esta era loca, donde nuestra vida está expuesta, dónde el éxito del vecino se juzga y etiqueta en un vídeo de 30 segundos.
Esa fue la semilla del Manifiesto Creativo.
Un día, durante uno de nuestros desayunos (Dani y yo siempre desayunamos juntos y aprovechamos para filosofar sobre la vida), dijimos:
«¿Cómo podemos ayudar a todas esas personas?»
Y así surgió este proyecto apasionante que nos saca de raíz de nuestra zona de confort para intentar llevar un mensaje bello, lleno de amor, de luz, de esperanza, con la intención de empoderar a las personas y ayudarlas a conectar con su creatividad… un superpoder que todos llevamos dentro.
Conocer a tantas personas de cerca nos ha demostrado que casi todos tenemos los mismos miedos y frenos, que muchas veces buscamos la “receta” fuera por no atrevernos a mirar dentro, que nos da más miedo el éxito que el fracaso…
Para nosotros, como pareja, socios, padres, NO siempre ha sido fácil, pero siempre nuestro camino ha sido auténtico. Hemos aprendido a escucharnos, apoyarnos y reinventarnos juntos. Hemos aprendido a ser creativos más allá de nuestra profesión.
Y ahora, la vida nos trae hasta aquí: El Manifiesto Creativo, un sueño que sentimos que es nuestro propósito en este viaje. Porque si algo hemos descubierto es que la creatividad no es solo un talento: es una forma de vivir.
Definitivamente este proyecto, que muchas veces nos da miedo, es lo que nuestra alma necesita porque sentimos felicidad, alegría y paz cada segundo de energía que le dedicamos.
El Manifiesto Creativo va más allá de nosotros porque “no estamos aquí para brillar sino para intentar iluminar”.
Este proyecto combina inspiración, historias reales, charlas inspiradoras, herramientas prácticas, comunidad y belleza visual, para ayudarte a integrar la creatividad en tu vida diaria, para estar más presente, más consciente, ser más tú.
¿Para quién es el manifiesto creativo?
Este espacio es para ti si sientes que has normalizado el malestar, que tu vida se ha vuelto mecánica, que has dejado de preguntarte qué necesitas o qué te hace bien.
Si tienes una vocecita dentro que te dice que algo tiene que cambiar, pero no sabes por dónde empezar.
Si intuyes que vivir con más sentido no es cuestión de cambiarlo todo, sino de reencontrarte con lo que ya llevas dentro: tu creatividad para vivir la vida que quieres.
Porque no te vamos a vender fórmulas mágicas.
No tenemos recetas ni pasos universales.
Simplemente queremos recorrer caminos junto a ti, hacer y responder preguntas, y buscar y encontrar inspiración.
No hablamos solo de arte. Hablamos de creatividad como una herramienta para crear y dar sentido a nuestro día a día.
Porque ser creativo no es inventar cosas geniales, es atreverte a vivir desde dentro hacia afuera, con autenticidad y libertad.
Ojalá este espacio te sirva como espejo, como impulso, como refugio.
Ojalá te ayude a sentirte menos sola o solo en tu búsqueda.
Ojalá te inspire a crear una vida con más sentido, más conexión y más verdad.
